Banco do Brasil prevé ahorros anuales por US$ 223 millones con reestructuración

El Banco do Brasil quiere cerrar sucursales, ampliar operaciones por medio de la banca digital, lanzar un plan de retiro voluntario y reducir las horas de trabajo de sus empleados en el marco de un plan de restructuración que, según el presidente del banco, Paulo Caffarelli, resultará en ahorros anuales por US$ 223,77.

Según anunció en un comunicado al mercado este domingo (20), hasta el 2017, el banco prevé cerrar 31 superintendencias regionales y 402 sucursales, además de las 51 ya cerradas el pasado octubre. Otras 379 agencias serán convertidas en puestos de atención automática.

La estrategia de expansión de los canales digitales prevé la apertura de otras 255 unidades de atención digital, que se sumarán a las 245 ya existentes. Esas unidades actualmente brindan atención a más de 1,3 millones de clientes, con una expectativa de atender a unos 4 millones hasta finales de 2017. Con la reestructuración, se recortarán 9,3 mil puestos a la plantilla del banco.

“El Banco de Brasil no está despidiendo nadie. Debido a la extinción de sucursales, habrá una reducción de la plantilla”, explicó Caffareli, agregando que el banco, que tiene una nómina de 109.159 empleados, gasta US$ 900 millones anuales más en salarios que bancos privados.

Jubilación

El banco ofrecerá a sus empleados una bonificación por retiro voluntario de 12 salarios, además de compensaciones por tiempo de servicio, que varían de uno a tres salarios, a los que se adhieran al llamado Plan Extraordinario de Jubilación Incentivada. De acuerdo con una simulación del banco, en caso de que los 18 mil empleados que ya cumplen con los requisitos para jubilarse se sumen al programa, habrá una reducción de gastos anuales por más de US$ 900 millones.

“Con esa reorganización, miramos hacia el futuro para hacer el Banco do Brasil más fuerte, para que cumpla su función como banco comercial y también como banco de fomento social”, afirmó Caffarelli.

Traducción: Lucas Magdiel