Lula: "No transformaremos las escuelas en cárceles"
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva dijo este martes (18) que Internet está plagada de discursos violentos, y agregó que la sociedad y las familias deben ser responsables de educar a los niños y adolescentes, y las plataformas en línea de difundir contenidos de forma responsable.
"Uno no debería poder predicar el odio en Internet, anunciar armas o enseñar a los niños a disparar, y eso es lo que vemos todos los días. La verdad es que un niño de seis o nueve años llevará a la escuela un reflejo de lo que oye en casa", dijo el mandatario, subrayando que el Plan Nacional de Educación de Brasil estipula que la comunidad debe responsabilizarse de lo que ocurre en las escuelas.
En su opinión, se ha producido un cambio de comportamiento en la sociedad. "Cuando un niño de ocho años piensa que un arma es la respuesta, ¿lo ha visto en la Biblia? No. ¿En un libro escolar? No. Lo ha oído de sus padres en casa, y por eso tenemos que tener en cuenta que sin la participación de los padres no se puede arreglar la educación en las escuelas", defendió.
En el palacio presidencial de Planalto, Lula convocó una reunión con los jefes de los poderes Judicial y Legislativo, ministros del gabinete, gobernadores, representantes de municipios y legisladores para debatir formas de promover la paz en las instituciones educativas y combatir el discurso del odio y el extremismo.
Toma de medidas
El gobierno también dio a conocer un programa destinado a proteger el entorno escolar. Los costes ascienden a R$ 3.115 millones para la instalación de centros psicológicos, además de infraestructura, equipamiento y formación.
Levantar muros e instalar detectores de metales no es el camino, afirmó Lula. "No vamos a transformar las escuelas en prisiones de máxima seguridad. Esa no es la solución. Además, no tenemos dinero para eso. Tampoco es políticamente correcto. No es humana ni socialmente correcto", declaró.
El ministro de Educación, Camilo Santana, también propuso que los gobiernos de los estados y municipios formen comités con las comunidades locales para diseñar estrategias que mantengan la seguridad en las escuelas. "Este es el momento de reunir a todos, independientemente de cuestiones políticas, partidistas o ideológicas. Lo que está en juego son las vidas de los niños y los jóvenes de este país", declaró.
