Las mujeres comandan el 37,3% de los hogares en Brasil

Las mujeres eran las responsables del 37,3% de los hogares brasileños en 2010, informó el último viernes (31) el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) en un estudio titulado “Estadísticas de Género: Un análisis de los Resultados del Censo 2010”. La cifra aumenta al 39,3% cuando se consideran las zonas urbanas, frente al 24,8% en zonas rurales.

La encuesta muestra que, cuando los cónyuges viven con sus hijos, se les ve a las mujeres como responsables del 22,7% de las residencias. Cuando solo uno de los padres vive con sus hijos, las mujeres están a cargo del 87,4% de los hogares. El IBGE aclaró que son los propios encuestados quienes identifican al jefe de la familia.

Al considerarse el color de la piel, las mujeres blancas presentan una tasa inferior a las negras (en el estudio, negras y pardas están ubicadas en la misma categoría). Mientras el 35,6% de los hogares son encabezados por mujeres del primer grupo (un índice por debajo del promedio nacional), en el segundo, esa cifra corresponde al 38,7%.

La participación de la mujer como jefa de familia supera la media nacional entre los hogares con menores ingresos. Cuando los ingresos per cápita de la familia llegan a la mitad de un salario mínimo (R$ 362 / US$ 148,11), la proporción de mujeres jefas de hogar asciende al 40,8% –o al 46,4% si consideradas solamente las zonas urbanas–. Sin embargo, si los ingresos superan US$ 592,42 (lo que equivale a dos salarios mínimos en Brasil), la tasa cae al 32,7%, cinco puntos porcentuales por debajo del promedio general (37,3%).

Sin tener en cuenta quien es la cabeza de la familia, el IBGE reporta que la participación de las mujeres en 2010 alcanzó el 40,9% de los ingresos de los hogares, en comparación con el 59,1% de los hombres. Pese a que comanden menos hogares en las zonas rurales, las mujeres aportan una mayor contribución sobre los ingresos familiares en esas zonas (42,4%) que en las urbanas (40,7%).

Aún según la encuesta, las mujeres negras tienen una mayor participación en los ingresos de sus familias (42%) que las blancas (39,7%).

Traducción: Lucas Magdiel