Deforestación en Mata Atlántica crece 27,2% en un año
La deforestación en la Mata Atlántica entre 2018 y 2019 creció el 27,2% ante el período anterior (2017-2018), según el Atlas de la Mata Atlántica, elaborado por la Fundación SOS Mata Atlántica y el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe). El porcentaje corresponde a un total de 14.502 hectáreas (ha). En el período anterior se deforestaron 11.399 ha.
El estado que más gravemente afectado por la deforestación fue Minas Gerais, con una pérdida de casi 5.000 ha de vegetación nativa. Bahia quedó en segundo lugar con 3.532 ha perdidas, seguido de Paraná con 2.767 ha. En los tres estados la deforestación aumentó 47%, 78% y 35% respectivamente en comparación con el período anterior.
Según Mario Mantovani, director de Políticas Públicas de SOS Mata Atlántica, el aumento de la deforestación en el bosque muestra que la destrucción del medioambiente no se ha producido solo en la Amazonia. "Esto es un hecho preocupante, pues solo restan 12,4% de la Mata Atlántica, el bioma más devastado del país hasta la fecha actual", dijo.
Para Marcia Hirota, directora ejecutiva de SOS Mata Atlántica y coordinadora general del Atlas, ese hallazgo es decepcionante, pues revela que la deforestación sigue ocurriendo en las mismas regiones. "Hemos observado varias deforestaciones en áreas del interior y en los límites de la Mata Atlántica, como el Cerrado en Minas Gerais, Bahia y Piauí, además de regiones con araucarias en Paraná. Como se trata de zonas ya cartografiadas anteriormente, la deforestación podría haberse evitado con una mayor acción del poder público. Es lamentable que continúen destruyendo nuestros bosques naturales, año tras año".
Por otro lado, el Atlas muestra que estados como Alagoas, Ceará, Espírito Santo, Goiás, Paraíba, Pernambuco, Río de Janeiro no han deforestado y dos estados han logrado poner a cero la deforestación por encima de tres hectáreas (Alagoas y Río Grande del Norte). Entre 2017 y 2018, Alagoas registró 8 ha de deforestación, mientras que Río Grande del Norte registró 13 ha.
"En muchos estados que han alcanzado el nivel de deforestación cero, puede producirse el llamado efecto hormiga: pequeñas deforestaciones que siguen ocurriendo en varias regiones y que el satélite no ve. El bosque nativo está siendo talado poco a poco, principalmente por la construcción de viviendas y la expansión urbana", explicó.