Médicos brasileños realizan cirugía intrauterina sin precedentes
Un procedimiento sin precedentes para corregir la malformación congénita de un feto de 33 semanas de edad se realizó en el Hospital da Criança e Maternidade, en São José do Rio Preto, estado de São Paulo, en junio. El feto tenía gastrosquisis –una apertura en el abdomen que hace que los órganos, generalmente los intestinos, se desarrollen fuera del cuerpo– y fue operado por medio de una fetoscopia. Hasta entonces, la corrección sólo se realizaba después del nacimiento.
El procedimiento pionero fue presentado esta semana en el Congreso Mundial de Medicina Fetal, en Alicante, España. En Brasil, uno de cada 2 mil bebés nace con este defecto de nacimiento.
Los médicos necesitaron una hora y 40 minutos para realizar el procedimiento. La fetoscopia es similar a la laparoscopia. Es un procedimiento poco invasivo, ya que no es una cirugía abierta. Se hacen cuatro pequeñas incisiones en el abdomen de la madre a través de las cuales se introducen instrumentos para mirar dentro del útero y corregir la malformación.
Después del nacimiento
Cuarenta y ocho horas después de la cirugía, aunque tanto la madre como el feto estaban bien, se observó que parte de los intestinos habían salido por una pequeña apertura, por lo que los médicos eligieron el tratamiento convencional y arreglaron el problema después del nacimiento.
El doctor Gustavo Henrique de Oliveira explicó que la sutura estaba intacta, pero una pequeña apertura, de unos tres milímetros, junto al cordón umbilical, hizo que los pliegues intestinales volvieran a salir. “Tuvimos mucho cuidado durante la cirugía para asegurarnos de que la sutura no estuviera tan cerca del cordón umbilical, ya que podría dificultar su circulación”, dijo.
Oliveira dijo que el incidente no significa que el procedimiento no haya tenido éxito, ya que el trabajo de parto ocurrió como se esperaba, cerca de la semana 34. A pesar del problema, dijeron los médicos, el bebé se benefició después del nacimiento. "Parece que el bebé está progresando un poco más, pero no puedo dar más información concreta", dijo.
Tiempo de hospitalización
“El procedimiento después del nacimiento hace que los bebés tarden mucho en poder ser alimentados. Los intestinos a menudo nacen semiparalizados o muy inflamados, y pasa mucho tiempo antes de que los bebés puedan ser alimentados por vía oral. Dependen de la nutrición parenteral y pasan mucho tiempo en la UCI. Las estancias hospitalarias promediaron unos 30 días después de la realización de la técnica tradicional”, explicó Oliveira.
La técnica se perfeccionará y se espera que la cirugía fetal resulte mejor que la operación convencional. Entre sus ventajas está el hecho de que la operación se realiza en un ambiente "lo más estéril posible", aún en el útero, lo que reduce al mínimo los riesgos de infección. Otra ventaja es la salud del bebé después del nacimiento, ya que el bebé puede ser dado de alta del hospital en dos o tres días y ser amamantado normalmente. Además, hay aspectos emocionales relacionados con la madre, ya que podrá estar con el bebé desde los primeros momentos.
La cirugía no está ampliamente disponible. La operación "requiere una formación técnica intensiva y una infraestructura que no se encuentra en todos los hospitales. Como es el caso con cualquier técnica nueva, todavía se necesitan mejoras y más experiencia antes de que se extienda", dijo Oliveira, agregando que se movilizaron varios equipos médicos con diferentes experiencias para esta cirugía. El Hospital da Criança fue seleccionado por su experiencia en la cirugía tradicional de gastrosquisis.