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Economía

El comercio de Brasil con América del Sur se recupera rápidamente

Lo evalúa la Asociación Brasileña de Comercio Exterior
Alana Gandra - Reportera de Agência Brasil
Publicado en 03/08/2022 - 07:48
Rio de Janeiro
Navio carregado com soja para exportação no Porto de Santos (SP)
Foto: Paulo Whitaker/Reuters/Arquivo
© Paulo Whitaker/Reuters/Arquivo

Una encuesta divulgada el lunes (1) por la Asociación Brasileña de Comercio Exterior (AEB) revela que, a partir de 2021 y con el alivio de la pandemia de covid-19, se reanudaron los resultados positivos del comercio entre Brasil y los demás países de América del Sur.

La encuesta de AEB muestra que los resultados acumulados en 2019, representados por los ingresos de US$ 27,8 mil millones en exportaciones, se vieron afectados en 2020 por la pandemia y cayeron a US$ 22,6 mil millones. Con la mejora de la crisis sanitaria el año siguiente, los ingresos por exportaciones se recuperaron rápidamente, ascendiendo a US$ 33,9 mil millones. Esta recuperación continúa en 2022, con ingresos de exportación proyectados de alrededor de US$ 41 mil millones en la región sudamericana.

Commodities

Al contrario de lo que sucede con las exportaciones brasileñas al mercado mundial, lideradas por commodities (productos agrícolas y minerales), las ventas de Brasil a América del Sur están representadas por productos manufacturados, con mayor valor agregado. En cuanto a las importaciones, predominan las materias primas o productos con poca elaboración.

“Nuestro mercado de productos manufacturados es América del Sur. Europa y Estados Unidos compran manufacturas de Brasil, pero muy poco. Asia no compra nada”, dijo el presidente ejecutivo de AEB, José Augusto de Castro. Según él, esto se explica por el hecho de que los países sudamericanos exportan materias primas y compran productos manufacturados a Brasil. “Nuestro país no escapa a la regla, exporta materias primas y compra productos manufacturados en el mercado exterior.”

El presidente ejecutivo de la AEB cree que las exportaciones brasileñas están creciendo porque las materias primas todavía tienen precios elevados en el mercado internacional. “Esto genera más divisas para estos países sudamericanos y más poder adquisitivo para las importaciones. Como resultado, los ingresos por importaciones de estos países aumentaron para el mundo. Esto está abriendo la posibilidad de importar más productos de terceros países. Y como Brasil es el más cercano, tiene menores costos logísticos, tiene posibilidad de transporte por carretera, disponibilidad de contenedores. Con estas facilidades, acaban comprando a Brasil, que está más cerca que Europa y Estados Unidos.”

Con la excepción de Paraguay, por la importación de electricidad, y Bolivia, por la importación de gas natural, los datos muestran que Brasil tiene superávit comercial con todos los demás países sudamericanos. Castro también señaló que el poder de negociación de los europeos, asiáticos y estadounidenses hace que los precios de sus productos sean superiores a los que practica Brasil para la región sudamericana.

Los principales productos exportados por Brasil a América del Sur son automóviles (11%) y autopartes (9,6%), a Argentina; fertilizantes (5%), maquinaria agrícola (4,6%) y automóviles (3,7%), para Paraguay; automóviles (8,2%), camionetas (6%), carne vacuna (4,9%) y porcina (4,5%), para Uruguay; petróleo (28%), para Chile; barras de hierro (10%) para Bolivia; petróleo (23%), para Perú; automóviles (16%), para Colombia; automóviles (9,1%), laminados (6,9%) y polímeros (5,1%), a Ecuador; y azúcar (18%), grasas y aceites vegetales (17%) y productos comestibles (11%), para Venezuela.

Por otro lado, los principales productos que compra Brasil a la región son camionetas (20%), automóviles (12%), trigo (12%), electricidad (8,9%), a Argentina; electricidad (32%) y soja (11%), de Paraguay; camionetas (11%), cereales (10%), artículos de plástico (9,6%) y electricidad (9%), de Uruguay; cobre (44%) y pescado entero (13%), de Chile; gas natural (88%), de Bolivia; cobre (35%) y otros minerales (19%), de Perú; carbón (31%), coque (18%) y polímeros (16%), de Colombia; plomo (31%) de Ecuador; alcoholes y fenoles (45%) y fertilizantes (31%), de Venezuela.