Estudio revela potencial del carbón de coco para descontaminar el agua
![Foto: Banco Mundial/Danilo Pinzon Centro de tratamento de água nas Filipinas](/sites/default/files/thumbnails/image/loading_v2.gif)
El agua de coco es un símbolo de la cultura playera de Brasil. Esta bebida fría es refrescante y ayuda a combatir el calor, especialmente durante el verano.
Sin embargo, un inconveniente es que cada 250 mililitros (ml) de agua de coco generan aproximadamente 1 kilogramo de basura, compuesta principalmente por las cáscaras de coco que no son consumidas. Además, estos residuos tardan entre 10 y 15 años en descomponerse.
La Universidad Federal Fluminense (UFF) llevó a cabo una investigación con el objetivo de encontrar una solución para este residuo. La meta era encontrar una alternativa que no solo evitara su inutilización y eliminación en vertederos sanitarios o en la naturaleza, sino que también contribuyera a la descontaminación del agua consumida por la población.
En su tesis doctoral, el investigador Bruno Salarini Peixoto, bajo la orientación de la profesora Marcela de Moraes, del Instituto de Química de la UFF, desarrolló una técnica más económica y eficiente para convertir el coco verde en carbón magnético y utilizarlo como descontaminante.
Marcela de Moraes explica que al quemarse, el coco se convierte en biocarbón. Luego, se activa y se le agregan nanopartículas magnéticas. Este producto tiene la capacidad de adsorber las sustancias contaminantes del agua, es decir, atraerlas a su superficie. Una vez magnetizado, se puede retirar del agua utilizando imanes después de haber adsorbido los contaminantes.
Según la experta, el método de eliminación de carbón del agua mediante magnetismo resulta más económico que el proceso de filtración.
Residuos medicinales
El biocarbón magnético es especialmente relevante debido a su capacidad para contribuir en la limpieza del agua, especialmente en la eliminación de residuos de medicamentos, incluyendo los antibióticos, en las depuradoras.
"El consumo de medicamentos ha aumentado [en el mundo]. Tomamos una gran cantidad de medicamentos y todo lo que tomamos eventualmente se excreta de alguna forma. Por ejemplo, en nuestra orina. Además, se suma la eliminación inadecuada de los fármacos", explica Marcela.
La investigadora indica que los métodos convencionales de purificación del agua en las plantas de tratamiento no pueden eliminar los contaminantes emergentes, que son aquellos contaminantes que han adquirido relevancia recientemente.
"Las plantas de tratamiento de agua y aguas residuales actuales no están diseñadas para eliminar estas sustancias. Por lo tanto, estas sustancias pasan a través de la planta de tratamiento y regresan a nosotros. Si no cambiamos esta situación, la cantidad de estas sustancias aumentará continuamente. Esto significa que estaremos consumiendo agua con dosis cada vez más altas de antibióticos", explica Marcela.
La investigadora menciona que el carbón vegetal puede ser agregado directamente al depósito de tratamiento de agua o colocado en la tubería por donde pasa el agua después de ser tratada en la estación.
"En este momento", dijo, "estamos evaluando la posibilidad de atrapar el carbón y permitir que el agua fluya a través de él. Estamos considerando patentar el proceso de producción de este biocarbón y el siguiente paso sería comunicarnos con la estación de tratamiento de agua en Niterói [municipio de Río de Janeiro, donde se encuentra la UFF], para comenzar a utilizar este material".
La investigación recibió financiamiento del Fondo de Apoyo a la Investigación del Estado de Río de Janeiro (Faperj), el Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (CNPq) y la Coordinación para el Perfeccionamiento del Personal de Enseñanza Superior (Capes).
![CBDN/Divulgação Vanessa Molon, snowboard. Foto: CBDN/Divulgação](/sites/default/files/thumbnails/image/loading_v2.gif)
![Divulgação/Prefeitura de Goiânia Prefeitura de Goiânia/Merenda escolar](/sites/default/files/thumbnails/image/loading_v2.gif)