Expertos apuntan a un desprestigo de los militares por investigaciones
Casi seis décadas después del golpe militar de 1964, las Fuerzas Armadas de Brasil enfrentan una investigación por un intento de golpe de Estado. En la opinión de tres expertos entrevistados por Agência Brasil, la reputación de los militares se ha visto afectada debido a las investigaciones sin precedentes y los arrestos de altos mandos militares.
Estos expertos, dedicados al estudio de temas relacionados con el papel de las Fuerzas Armadas, consideran que la investigación llevada a cabo por la Policía Federal sobre la intentona golpista, junto con las detenciones ordenadas por el Poder Judicial, dejarán una huella histórica y enviarán "mensajes" a la sociedad acerca del compromiso con el respeto a la democracia.
Esta semana, la atención mediática se centró en las declaraciones proporcionadas a la Policía Federal por excomandantes de las tres fuerzas armadas, quienes brindaron explicaciones en calidad de testigos. La Policía Federal, por su parte, se abstiene de hacer comentarios sobre las investigaciones en curso, que incluyen a otros militares.
Para la profesora Juliana Bigatão, coordinadora del Observatorio Brasileño de Defensa y Fuerzas Armadas de la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp), las investigaciones deberían tener un impacto significativo en la percepción que los brasileños tienen de las fuerzas militares.
"Es crucial considerar que este tipo de investigación es sin precedentes, incluyendo las detenciones preventivas de miembros de las Fuerzas Armadas. Brasil carece de una tradición en la investigación y sanción de militares por crímenes contra la democracia", afirma la profesora.
Según la evaluación del profesor João Roberto Martins Filho, docente en la Universidad Federal de São Carlos (Ufscar), la singularidad de juzgar a militares por la justicia civil marca una diferencia respecto a otro momento histórico, particularmente después del golpe militar de 1964, cuando más de 6.000 militares fueron detenidos y destituidos.
"En aquel episodio, los militares que se opusieron al golpe fueron investigados y juzgados por sus propios colegas a través de la Investigación de la Policía Militar (IPM)".
El profesor subraya que la investigación de generales del ejército, el rango más alto en las Fuerzas Armadas, coloca el episodio actual en una categoría completamente distinta.
Justicia
La profesora Ana Amélia Penido, miembro del Grupo de Estudios de Defensa y Seguridad Internacional (Gedes), destaca la rareza de condenas a oficiales de rango general, incluso dentro del ámbito de la justicia militar. "En general, la justicia 'funciona' para los rangos inferiores", afirma la docente de la Universidad Estatal de São Paulo (Unesp).
En su opinión, la investigación transmite un "mensaje" a la sociedad, indicando que los presuntos crímenes cometidos por militares deben ser investigados de la misma manera que se investigan los casos civiles.
Para Juliana Bigatão, es crucial que las investigaciones se difundan ampliamente, y aún más importante que haya "desenlaces" en los casos para evitar la sensación de impunidad. Los expertos subrayan que, debido a la Ley de Amnistía de 1979, ningún miembro de las Fuerzas Armadas tuvo que rendir cuentas por crímenes durante la dictadura.
Imagen
Según los investigadores entrevistados por Agência Brasil, aún es temprano para evaluar con precisión el impacto de estos episodios en la imagen de las Fuerzas Armadas.
"Históricamente, los militares son bien vistos por la población. No tanto por sus funciones militares, sino por las actividades civiles que realizan", señala Ana Amélia. Recuerda que los militares brasileños son reconocidos por acciones como el transporte de cestas de alimentos básicos y otros servicios, como garantizar el suministro de agua en áreas de difícil acceso. Sin embargo, entiende que los acontecimientos antidemocráticos del 8 de enero de 2023 han afectado negativamente la opinión favorable hacia ellos.
El profesor João Roberto Martins Filho opina que las Fuerzas Armadas están experimentando una crisis de imagen y que los líderes actuales han expresado su intención de superar los últimos acontecimientos. Destaca que hubo oficiales generales legalistas que contribuyeron a evitar un golpe.
Cuando se inició la Operación Tempus Veritatis el 8 de febrero, el Ejército anunció que colaboraría con la Policía Federal y proporcionaría toda la información necesaria para la investigación. "Esta postura era apropiada en una democracia", afirma Juliana Bigatão. Recuerda que el Ejército destituyó a los mandos militares que eran objeto de la operación de la Policía Federal. "Los representantes de las altas esferas de las Fuerzas Armadas están colaborando o adoptando una posición de investigar lo sucedido. Es una señal muy importante y es la actitud que se espera en un régimen democrático", sostiene.
Para Ana Amélia, los militares que se opusieron al evento del 8 de enero y a la presunta intentona golpista adoptaron una postura institucional. "Creo que es necesario buscar medidas para ventilar los cuarteles, para que se asemejen más a lo que sucede en la sociedad".
Riesgos de politización
La politización de las Fuerzas Armadas durante el gobierno de Jair Bolsonaro es identificada por Bigatão como la raíz del problema. "Había más militares en cargos gubernamentales que en la época del propio régimen militar", destaca.
Ana Penido aboga por cambiar el escenario de aislamiento de los militares en los cuarteles y aboga por la integración entre el ámbito civil y militar, tanto en la formación militar como en áreas como inteligencia, justicia y presupuesto. Explica que la politización no es exclusiva de Brasil y señala que en otros países, este grado de politización también se da en operaciones y en tropas más vinculadas a operaciones especiales.
João Roberto Martins Filho menciona el ejemplo de Alemania, donde no se permite que las Fuerzas Armadas estén vinculadas a partidos políticos, aprendiendo de la experiencia del período nazi. "Hoy, las Fuerzas Armadas allí son culturalmente más abiertas y democráticas".
El Ministerio de Defensa no ha respondido a las solicitudes de comentarios sobre las evaluaciones de los investigadores con respecto al deterioro de la imagen de las Fuerzas Armadas.