"Queda mucho por hacer", dice Lula en reunión ministerial
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva lideró el lunes (18) la primera reunión ministerial del año 2024, destacando que aún hay un largo camino por recorrer. En su evaluación, el país fue "completamente abandonado" por la administración anterior y estuvo al borde de sufrir un golpe de Estado.
"Nos enfrentamos a una gran cantidad de desafíos en todos los ámbitos, como era de esperar, dado todo lo que nos comprometimos a abordar durante la campaña electoral. A lo largo de un año y tres meses de mandato, hemos logrado avances significativos, pero también reconocemos que queda mucho por hacer. Dudo que hubiéramos llegado tan lejos sin el esfuerzo individual de cada uno de ustedes", expresó el presidente Lula a sus ministros durante la inauguración de la reunión, la cual fue transmitida por las redes sociales y Canal Gov.
El presidente también criticó la gestión del gobierno anterior, señalando que su predecesor, Jair Bolsonaro, se enfocó en "fomentar el odio entre las personas" en lugar de desarrollar políticas sociales sólidas.
Durante la reunión en el Palacio Presidencial de Planalto, Lula observó que varios ministerios enfrentan una falta de personal y que aún no se ha podido satisfacer completamente la demanda de exámenes para el servicio público. Además, mencionó que la mayoría de los ministerios carece de políticas de inclusión social, y algunos han sido desmantelados por completo, como el Ministerio de Cultura.
"Todos ustedes son conscientes de los desafíos que heredamos al asumir nuestras responsabilidades", afirmó el presidente, resaltando las acciones emprendidas desde el inicio de su mandato, que incluyen la revitalización de programas como Farmacia Popular, Más Médicos y Bolsa Família, así como iniciativas educativas, la reducción del desempleo y el fortalecimiento de la política exterior, que ha resultado en la apertura de 98 nuevos mercados para los productos agrícolas brasileños.
Golpe de Estado
El mandatario también abordó la divulgación de los testimonios de los ex comandantes de las Fuerzas Armadas a la Policía Federal (PF). En su evaluación, Brasil "corrió un grave riesgo" de caer en un nuevo período antidemocrático a raíz del intento de golpe de Estado el 8 de enero de 2023, cuando las sedes de los Tres Poderes fueron vandalizadas en Brasilia.
"Si hace tres meses, cuando hablábamos de golpe, parecía solo una insinuación, hoy tenemos la certeza de que este país corrió un grave riesgo de sufrir un golpe tras las elecciones de 2022", afirmó Lula, elogiando además la negativa de los comandantes de las Fuerzas Armadas a unirse al plan golpista.
Según los testimonios dados a la Policía Federal (PF) por los ex comandantes del Ejército, Marco Antonio Freire Gomes, y de la Fuerza Aérea, Carlos Almeida Baptista Júnior, Bolsonaro estaba en el centro de las conspiraciones para una ruptura democrática.
Para Lula, ahora es el momento de fortalecer la democracia. "El pueblo fue más sabio, más valiente, y nosotros estamos aquí con la tarea de llevar a cabo algo muy importante, que no se trata solo de resolver los problemas económicos, de salud, transporte, agricultura, sino que también debemos abordar algo mucho más serio, que es la consolidación del proceso democrático de este país. La democracia se vuelve algo fundamental en nuestras vidas", declaró.