Brasil vierte al océano 1,3 millones de toneladas de plástico al año
Brasil es el octavo país del mundo y el mayor contaminador de América Latina en lo que se refiere a vertidos de plástico en el océano. Anualmente se arrojan 1,3 millones de toneladas, según el informe “Fragmentos de la Destrucción: el impacto del plástico en la biodiversidad marina brasileña”, divulgado esta semana por la organización no gubernamental Oceana. Este volumen representa el 8% de este tipo de contaminación en el conjunto del planeta.
Según el oceanólogo y director general de Oceana, Ademilson Zamboni, el estudio fue concebido como una herramienta para dimensionar el problema de la contaminación por plástico en el país y debe impulsar una transición que supere los desafíos ambientales, económicos y sociales causados por el modelo actual. “El plástico que contamina nuestros mares llega ahí gracias a un modelo de producción y eliminación que urge sustituir.”
El impacto de esta contaminación en los ecosistemas e incluso en la alimentación humana es una de las evidencias observadas por los investigadores, que constataron la ingestión de plástico en 200 especies marinas, el 85% de ellas en peligro de extinción. De estos animales, uno de cada 10 murió como consecuencia de problemas como desnutrición y reducción de la inmunidad tras la exposición a compuestos químicos nocivos para la especie, describe el informe de la ONG.
A partir de las bases de datos de los proyectos de vigilancia de playas de las cuencas de Santos y Campos, que analizaron el contenido estomacal de 12.280 aves, reptiles y mamíferos marinos, los investigadores encontraron plástico en 49 de las 99 especies estudiadas. Las especies más contaminadas fueron las tortugas, con residuos sólidos presentes en el 82,2% de las muestras.
En la costa brasileña, la ingestión de plástico se ha registrado en todas las especies de tortugas marinas, pero en el caso específico de las tortugas verdes, los investigadores descubrieron que la tasa de ingestión entre los 250 individuos de la especie estudiada es del 70%, y puede llegar al 100% en algunas regiones.
Entre las especies estudiadas, la tasa de peces amazónicos que contenían plástico o microplástico en el aparato digestivo y las branquias también fue sorprendente: el 98% de las 14 especies analizadas en arroyos del bioma.
Además de peces, se encontró contaminación en moluscos como ostras y mejillones, lo que indica, según los investigadores, que el consumo de estas especies como alimento es una de las vías de contaminación humana.
“La devastación del plástico sobre la vida marina continúa en grandes proporciones y no hay otra salida que reducir el elevado volumen de residuos que se vierten continuamente al mar”, subraya el informe.
Recomendaciones
Entre las recomendaciones para los poderes públicos hechas por el grupo de investigadores están la inversión en investigación y desarrollo, la promoción de alternativas asequibles al plástico y, sobre todo, la construcción de una legislación específica para regular la producción de la sustancia, especialmente de plásticos desechables.