Las familias son las principales financiadoras del deporte en Brasil
Las prácticas deportivas en Brasil son impulsadas principalmente por las familias de los practicantes. Además, la mayor parte de las personas sedentarias en el país pertenece a las capas más pobres de la población. Esos y miles de otros datos forman parte del sondeo Diagnóstico Nacional del Deporte, llevado a cabo por el Ministerio del Deporte en colaboración con universidades federales de varios estados y divulgado en junio del año pasado, aunque solo un 5% de su contenido se hizo público. Informaciones inéditas sobre el tema se expusieron el miércoles (17) en Casa Brasil, en Río de Janeiro.
El gasto de las familias brasileñas con prácticas y equipos relacionados con el deporte ascendió a unos US$ 14 mil millones en el 2013, ante un gasto promedio mensual por familia de cerca de US$ 30. El sector privado financió cerca de US$ 580 millones en ese período, mientras que las empresas públicas contribuyeron con un total US$ 140 millones. Por su vez, el gobierno federal ha invertido aproximadamente US$ 434 millones en el área de deportes en 2013, un crecimiento que se vio impulsado por los grandes eventos celebrados en el país. Para Cássia Damiani, una de las investigadoras responsables del estudio, profesora de la Universidad Federal de Ceará, es fundamental estimular el sector privado a patrocinar no solo deportes de alto rendimiento, sino también actividades que alejen a los brasileños del sedentarismo, un problema que afecta al 45,9% de la población.
“Brasil invirtió mucho y ganó importantes espacios en esa última década en lo que se refiere a inversiones en infraestructura. Sin embargo, para universalizar las prácticas deportivas, no son suficientes los recursos del gobierno: son necesarias articulaciones con el sector privado e inversiones socialmente responsables para la formación de la juventud. Sigue siendo muy baja la inversión de las empresas en el deporte, y ese mercado necesita ser explorado”, afirma la investigadora.
Ailton Oliveira, profesor de la Universidad Federal de Ceará y uno de los coordinadores de la investigación, destaca el hecho de que, cuanto menor sea el nivel educativo, menos frecuente será la práctica de deportes: “Quien tiene un menor nivel educativo, tiene peores condiciones económicas, vive más lejos, tiene una carga de trabajo mayor, y, por lo tanto, no tiene tiempo para dedicarse a un deporte. Eso muestra que, para democratizar el acceso a la práctica de deportes, es necesario promover mejoras en áreas como movilidad urbana, trabajo y vivienda”, dice.
Los investigadores urgieron a que esos datos sean difundidos pronto para que sean más efectivos. Son 220 tablas con informaciones sobre el deporte. “Necesitamos dar publicidad a ese informe, de modo que, a partir de ahí, los investigadores puedan producir más datos. Son informaciones que hay que discutir con la comunidad”, comentó el profesor.
Hasta el momento de la publicación de este reportaje, el ministerio no había respondido a Agência Brasil sobre el motivo de la demora en la difusión del sondeo en su totalidad, ni informó sobre plazos.
El sondeo fue realizado a partir de entrevistas a 9 mil personas y se desarrolló con una metodología basada en un proyecto similar en Europa, que se llevó a cabo en 17 países con miras a monitorizar las prácticas deportivas de sus poblaciones.
Traducción: Lucas Magdiel
Fonte: Las familias son las principales financiadoras del deporte en Brasil