El sábado (12) es de expectativa a causa del partido entre Brasil y Holanda, que disputan el tercer lugar en el Mundial. El juego será en el Estadio Mané Garrincha, en Brasilia. Después de la goleada de 7-1 favorable a Alemania, la selección brasileña va a jugar con dos cambios en el equipo. El técnico Luiz Felipe Scolari, no dio detalles, pero afirmó que el objetivo es dar oportunidad a atletas que jugaron poco en la Copa. Scolari afirmó que el equipo está motivado y que la selección brasileña debe valorar el tercer lugar en el Mundial. Y agregó que llegar entre los cuatro mejores “no es el fin del mundo”.
Escuche en el portal Voces del Sur
Voces del Sur: Boletín en español con noticias de Brasil. Asociación entre la Radioagência Nacional, la Agência Brasil y el portal Voces del Sur.
Ya el entrenador holandés Louis Van Gaal pidió a sus jugadores una victoria sobre Brasil como un regalo de despedida. Él dijo que los jugadores holandeses están tristes porque confiaban en que serían campeones, y que hubiera preferido perder por 7-1, como le ocurrió a Brasil, que ir a penales. Pese a la tristeza, el equipo holandés está motivado para ganar.
Con relación al partido entre Argentina y Alemania, el domingo, en la final de la Copa en el estadio Maracaná de Río de Janeiro, más de 25 000 agentes participarán en el plan de seguridad.
De acuerdo con José Mariano Beltrame, secretario departamental de seguridad pública, esta será la mayor operación de seguridad jamás llevada a cabo en Río de Janeiro y en Brasil, superando incluso la Conferencia Río+20 de las Naciones Unidas en 2012 y la clausura de la Jornada Mundial de la Juventud en 2013, con la presencia del Papa Francisco.
Estarán involucrados en el operativo unos 10 000 efectivos de la Policía Militar y 9 300 militares, además de bomberos, policías federales, agentes de la Policía Federal de Carreteras, guardias municipales y agentes de tráfico y de la Fuerza Nacional de Seguridad.
